Tras la aprobación de la nueva tarifa regulada del gas para las comunidades de vecinos con calefacción central, TUR 4, y ante el previsible incremento de solicitudes, ISTA, compañía líder en España en la instalación de contadores individuales y repartidores de costes de calefacción, con más de 1,2 millones de dispositivos instalados en España, contratará a 150 empleados para garantizar que todos sus clientes puedan beneficiarse de la misma.
La TUR 4 del gas contempla una potencial reducción del 50% de la factura energética para cerca de 1,7 millones de viviendas –aquellas con sistemas centralizados–. Sin embargo, el Gobierno condiciona su aplicación a que estén instalados los contadores o repartidores de calefacción antes del 30 de septiembre de 2023.
“Parece lógico que las familias que se beneficien de esta nueva tarifa sean precisamente aquellas que tienen información de cuánto, dónde y cómo consumen su calefacción, y eso solo es posible si tienen instalados los contadores o los repartidores de costes de calefacción, y pagan en función de lo que realmente consumen” afirma Ignacio Abati, director general de ISTA y presidente de AERCCA, la Asociación Española para la promoción de la contabilización individual.
En la actualidad, tan solo el 25% de las 1,7 millones de viviendas con calefacción central han realizado la transición a la medición individual. De hecho, entre un 30% y un 40% del total de hogares susceptibles de realizar este cambio, se han acogido a la excepción contemplada en el Real Decreto de Contadores de Costes de Calefacción –en base al cálculo teórico del plazo de amortización–, que les exime de realizar la instalación.
“Ahora, con la aprobación de la nueva tarifa regulada prevemos que se produzca un incremento de las adhesiones a esta iniciativa de eficiencia energética, que trae reducciones de consumo en calefacción de entre el 25% y el 40%, según el IDAE, además de la rebaja en la propia tarifa del gas”, señala el director general de ISTA.
Para hacer frente a la elevada demanda de instalaciones, ISTA ha iniciado un proceso de contratación que le llevará a incrementar su plantilla de instaladores en 150 empleados.
Junto a la instalación de los repartidores de costes para individualizar los consumos, la compañía también aconseja llevar a cabo otras iniciativas para ahorrar en combustible en las comunidades de vecinos sin tener que realizar nuevas inversiones. Es el caso de SOPHIA, un dispositivo que se instala en la caldera central y la gestiona de forma inteligente, con ahorros de hasta un 30% en el consumo de combustible comunitario, ya sea éste gasoil, gas natural, o cualquier otro.
Además, desde la compañía recuerdan que para optimizar el uso de los equipos de calefacción y reducir la factura energética es importante mantener una temperatura entre 19º y 21º grados, evitando las pérdidas de energía en el hogar.