El Camping L’Amuravela y el Hotel la Quinta de la Villanueva tienen muchas más cosas en común además de pertenecer al mismo grupo hostelero, estar ubicados en la costa asturiana y contar con una dilatada experiencia en la atención y el servicio a los turistas que ocupan sus plazas. Estos dos establecimientos también comparten una fuerte apuesta por la eficiencia energética que los ha llevado a confiar en WOLF para la renovación de sus instalaciones de climatización.
El Camping L´Almuravela, situado en la pintoresca y marinera localidad de Cudillero, cuenta con más de 600 plazas. Ubicado en el recinto amurallado de una antigua casona de indianos, se divide en bungalows y zona de acampada y dispone de unas completas instalaciones con piscina al aire libre, pista de pádel, petanca, recinto polivalente de juegos, zona de repostaje, parque infantil y cafetería.
Pero si algo destaca en este establecimiento turístico es su marcada política ambiental con sistema de recuperación de aguas grises, paneles solares térmicos y fotovoltaicos y una instalación de geotermia que utiliza el calor de la tierra para calentar el agua de las duchas.
A estas instalaciones, su propietario, Carmelo González ha querido añadir una bomba de calor modelo CHA Monoblock 16/20 para complementar la producción de agua caliente sanitaria en sustitución de una caldera de gasóleo. “Nuestra apuesta medioambiental se ha unido a las perspectivas que anticipan la apuesta por tecnologías y combustibles limpios. Este cóctel nos ha hecho decidirnos por una solución como la aerotermia que creemos muy apropiada para nuestras instalaciones”.
Gerardo Robles Instalaciones ha sido la empresa responsable de la prescripción e instalación de este sistema de aerotermia que se hibrida con la instalación solar del camping y que quiere ampliar sus instalaciones en un futuro cercano.
La empresa asturiana también ha sido la prescriptora e instaladora de las nuevas soluciones WOLF en el Hotel la Quinta de Villanueva situado en Colombres, una antigua Casona Indiana transformada en establecimiento rural con 19 habitaciones. “Con un establecimiento abierto todo el año hay que pensar en una gran variedad climática, incluso en los meses más fríos. Por este motivo, y gracias al uso de una caldera eficiente, nos hemos preparado frente a las temperaturas más extremas y, al mismo tiempo, reforzaremos la climatización con una bomba de calor, que nos brinda mayores posibilidades de ahorro y eficiencia”, asegura Gonzalez.
En la magníficamente conservada villa construida en 1908 se ha hibridado un sistema de aerotermia CHA Monobloc 16/20, en este caso con una caldera mural CGB-2 38 para dar servicio de calefacción (radiadores) y agua caliente sanitaria al hotel. “Tanto la bomba de calor como la caldera trabajan, mediante un KM-2 V2 como sistema en cascada, contra un depósito de inercia de 300 litros y de ahí, a 2 depósitos de ACS de 500 litros”, explican desde la empresa instaladora.
WOLF ha valorado muy positivamente este caso de éxito en el norte de España. Para el director General de la división de Heating and Ventilation de WOLF Ibérica, Antonio Torrado, “es muy satisfactorio ver cómo todos los actores que han participado en estas intervenciones están completamente concienciados de las ventajas que ofrece la hibridación de sistemas y las grandes posibilidades que aporta para potenciar la eficiencia energética, el ahorro y el confort de establecimientos de cualquier tipo”.